¡ALERTA PUEBLO DE DIOS!
BENEDICTO XVI: PEOR Y MÁS PERVERSO QUE FRANCISCO
BENEDICTO XVI: PEOR Y MÁS PERVERSO QUE FRANCISCO
PARTE 2 SERIE
LOS GOLPES DEMOLEDORES CONTRA “EL ETERNO SACRIFICIO Y LA IGLESIA” ENCABEZADOS POR BENEDICTO XVI.
· MÁS DE 60 RAZONES Y HECHOS COMETIDOS POR BENEDICTO XVI ANTES Y EN EL C.V. II; EN LA CONGREGACIÓN DE LA DOCTRINA DE LA FE; Y COMO PAPA.
· BENEDICTO XVI ES PEOR QUE FRANCISCO
Sin fe es imposible agradar a Dios
(San Pablo, Epístola a los Hebreos, 11, 6)
(San Pablo, Epístola a los Hebreos, 11, 6)
Pero aun cuando nosotros mismos,
o un Ángel del Cielo,
os predique un Evangelio
diferente del que nosotros os hemos anunciado,
sea anatema
(San Pablo, Epístola a los Gálatas, 1, 8)
o un Ángel del Cielo,
os predique un Evangelio
diferente del que nosotros os hemos anunciado,
sea anatema
(San Pablo, Epístola a los Gálatas, 1, 8)
Antecedentes.
El documento analítico conocido como “60 Razones por las que no puedo asistir a la Nueva Misa”, nos brinda también elementos que se suman a los grandes golpes que Joseph Karl Ratzinger Peintner, judío farisaico alemán, de ascendencia perteneciente al Priorato de Praga, ha tenido un negro fondo en su razón de ser, por sus prácticas de magia hebraica o hechicería judía con el kabalismo, y por las metas sectarias de este Priorato –uno de los más fuertes de la Sinagoga de Satanás, en competencia con el Priorato de Sión”, ambos como tentáculos del “nuevo Sanedrín enemigo de Jesús”-.
La sinagoga de Satanás ha querido siempre la demolición de la Iglesia Católica del verdadero Mesías, que ya vino hace más de 2,000 años a la Tierra, porque les decía a los rabinos de entonces sus verdades, les imponían cargas muy pesadas al Pueblo de Israel que ni ellos mismos podían cumplir, los esquilmaban y habían convertido varios templos o sinagogas en centros de mercadeo. Jesús les llamó, como lo que siguen siendo en pleno 2019: “raza de víboras, sepulcros blanqueados, hipócritas”.
· Las Sagradas Escrituras prevalecen sobre las opiniones de los hombres y de los clérigos.
Además, Jesús fundó en su tiempo, Su Iglesia sobre Pedro y previo a Su Crucifixión estableció la Nueva Pascua donde instituyó, en la Última Cena con Sus Apóstoles, convirtiéndose Él mismo se inmolaba “por todos los hombres”; con Su Pasión Dolorosa, Crucifixión y Muerte triunfaba sobre los demonios, convertido en el Cordero Inmolado, pues un cordero comían los judíos en la celebración de su pascua, recordando la salida de su esclavitud en Egipto. Aquí está el sentido de la Última Cena y fundación de la Nueva Pascua con la Nueva Iglesia: “todo aquél que come Mi Carne y bebe Mi Sangre, ése tendrá vida eterna; y vida en abundancia”.
· Jesús dijo: ‘Los hijos de las tinieblas son más astutos que los hijos de la Luz’. (Lucas 16)
Ahora póngase mucha atención: Las Sagradas Escrituras nos dicen todo el tiempo que “Yahvé-Dios es Dios, Padre y Creador de todos los hombres, NO de muchos, sino DE TODOS. Sabiendo esto los judíos farisaicos, a los que pertenece Joseph Karl Ratzinger Peintner –Benedicto XVI- , hijo de padre y madre judíos, de linaje farisaico y del Priorato de Praga, entre sus metas, desde hace más de cinco siglos, ha estado la de “apoderarse de la Silla de Pedro para destruir a la Iglesia”, y a través de un Concilio –el C.V. II-, así no se notaría el ataque artero y todo quedaría “oficializado”; y no sería un ataque externo sino interno y casi imperceptible.
Así, destruyendo la Santa Misa o Eterno Sacrificio de San Pío V en latín, le quitarían lo más valioso que tiene la Iglesia de Cristo y la destruirían más rápido, y enfocaron su ataque contra el Sacramento de la Eucaristía, empobreciendo su grandiosa Liturgia y trastocando su “lengua oficial” que permitía a los sacerdotes de cualquier nación, celebrar la Santa Misa, el Ordo Missae, en cualquier parte y sin alteraciones ni modificaciones caprichosas que contribuyeran a destruirla cada vez más y alejarla de las enseñanzas y doctrina de la fe tradicional, tal como se aprecian las diferencias entre la Misa Tradicional de San Pío V en latín u Ordo Missae, en relación a la actual misa moderna de corte protestante o Novus Ordo Missae promovida desde ese Concilio a través de los cardenales cómplices hacia los obispos que creyeron que éste gravísimo cambio era oficial y dispuesto por el Papa Paulo VI.
Muchas de estas diferencias causadas por el movimiento oscuro de la jerarquía masónica con el judío farisaico Joseph Ratzinger, impulsor y cabeza visible del modernismo en el Concilio, fueron evidenciadas en un documento de análisis al respecto, donde denuncia de forma detallada y como Perito en Liturgia, por el excelentísimo cardenal Alfons M. Stickler.
El grupo mafioso de cardenales sectarios y del Priorato, trataban de suprimir el Eterno Sacrificio, como lo profetizó Daniel en el Antiguo Testamento, porque “nulificadas las palabras de la Consagración para que opere la Transubstanciación, que tienen un carácter inalterable y conforme al sentido de las Sagradas Escrituras, donde se lee constantemente que Dios quiere salvar a todos los hombres y no solo a muchos, envió a Su Hijo Único a cumplir con esta Misión Redentora, entregando hasta Su Última Gota de Sangre durante su Pasión y Crucifixión”.
Dios, es Dios de todos, y no de unos cuantos, eso es lo que no quieren que entendamos los rabinos masones e illuminati, protestantes y jerarcas modernistas infiltrados en la Iglesia; desde el Vaticano quieren confundir a los fieles del Mundo entero desde entonces.
En la Última Cena, Jesús pronunció las Palabras que deben decirse para que el pan ácimo y el vino, se conviertan en el Cuerpo y la Sangre de Cristo, que por tantos siglos protegía al Mundo de las acciones de Satanás. La alteración de estas palabras nulifica la Transubstanciación, y entonces, Jesús ya no está presente con Su Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad en lo que debiera ser el Cuerpo y la Sangre de Cristo, porque el Espíritu Santo no desciende en el momento que deben pronunciarse estas Palabras en la Consagración “correctamente dichas” por el Sacerdote.
· Benedicto XVI atacó al Eterno Sacrificio nulificándolo.
Alto verdaderamente TERRIBLE hizo al tercer mes de su reinado el judío farisaico Benedicto XVI y su grupo sectarios, ordenó la alteración de las Palabras de la Consagración haciéndonos creer que era una mejor interpretación de esas palabras, el decir que “POR MUCHOS” en lugar de decir “POR TODOS”, cuando que Dios quiere salvar A TODOS y no a MUCHOS, está en el hombre decidirse si quiere aprovechar esta salvación y definirse con Dios y no con Satanás.
Con la llegada de Benedicto XVI a la Silla de Pedro, estaba cumpliéndose una antigua profecía que advertía: “Un judío farisaico, de los que asesinaron a Jesús, se sentará en la Silla de Pedro para burlarse de Él y blasfemarlo”. Otra Revelación de Dios a los profetas confirmó el hecho: “Ya llegó ‘el ladrón’ al lugar Más Santo que tenéis sobre la Tierra”.
· El juego oculto de lobos en el Vaticano entre Benedicto XVI y Francisco.
Benedicto XVI es “EL LADRÓN QUE SE ROBÓ LA SILLA DE PEDRO”, antes que Francisco, miembro de otro priorato, el de Sión, que se identifica con su cruz pectoral del ‘Ordo Templi Orientis’ de culto egipcio. Pero las acciones de Joseph Ratzinger o Benedicto XVI van desde antes del Concilio Vaticano II: como profesor y escritor modernista; infiltrando “la corriente modernista” en el Concilio Vaticano II; como Prefecto de la Congregación de la Doctrina de la Fe –ocultando y distorsionando el Tercer Secreto de Fátima, etc.; como Papa; y lo que pretende actualmente hacer ahora con su Priorato, volver a la Silla de Pedro, haciendo que muchos crean que él es “el legítimo papa”, nada más falso. Benedicto XVI, judío farisaico, es mucho peor y más perverso que Francisco.
Como San Jerónimo, debe recurrirse al Espíritu Santo para ser iluminados y tener las ideas, los conceptos y los preceptos bien claros y precisos.
Más de 60 RAZONES por las que, en conciencia, no puedo asistir a la “NUEVA MISA” o Misa de Pablo VI, o la Misa Moderna, sea en Latín o en Español, de cara al pueblo o de cara al Sagrario y cómo Benedicto XVI nos dejó sin la Sagrada Comunión, el Cuerpo y la Sangre de Cristo.
Y, por lo tanto, por las mismas razones, continúo con la Misa tradicional, o Misa de San Pío V, o Misa tridentina, o Misa de siempre.
1.- Porque la Misa Nueva es equívoca y ambigua. Es usada también por protestantes.Ahora bien, rezamos según creemos. Por lo tanto, la Nueva Misa no es una profesión de Fe inequívoca, sino ambigua. Y nuestra Fe no puede ser al mismo tiempo católica y protestante -“mucho menos de una iglesia ecuménica”- .
2.- Porque los cambios no fueron insignificantes, sino que “se trata de una restauración fundamental, yo diría de una mudanza total y, en ciertos puntos, de una verdadera nueva creación” (Palabras de Monseñor Aníbal Bugnini, coautor de la Misa Nueva traicionando la Iglesia de Cristo y del grupo de jerarcas masones infiltrados para demoler la Iglesia junto con el cardenal Joseph Ratzinger Peintner, judío alemán del Priorato de Praga y cabeza visible de la infernal corriente modernista desde el Concilio Vaticano II; Bugnini, en contubernio con los jerarcas masones y de los Prioratos que encabezaban Ratzinger –luego Benedicto XVI- y los cardenales Joseph Frings y Lercaro [Apoc.13,11], introdujo 6 pastores protestantes para elaborar la nueva misa o “Novus Ordo Missae”).
3.- Porque estos cambios en la Misa, llevan a pensar “que la Verdad, siempre creída por el pueblo cristiano, puede cambiar o desviarse sin infidelidad al depósito sagrado de la Doctrina, al cual la Fe católica está vinculada por toda la eternidad” (Cardenales Ottaviani y Bacci en carta a Pablo VI).
4.- Porque la Nueva Misa representa “un alejamiento impresionante de la Teología Católica de la Misa según fue formulada en la Sesión XXII del Concilio de Trento” que, al establecer los “cánones”, proporcionaba una “barrera infranqueable a cualquier herejía que fuera en contra de la integridad del Ministerio”.
5.- Porque la diferencia entre las dos misas no es sencillamente de mero detalle o simplemente cambio en la ceremonia, sino “lo que se presenta como nuevo en la Misa Nueva es materia referente a verdades perennes”.
6.- Porque “las recientes reformas han demostrado suficientemente que las nuevas transformaciones en la liturgia, sólo conducen a una total desorientación de los fieles, quienes ya presentan señales de indiferencia y de disminución en su Fe”.
7.- Porque en tiempo de confusión como el actual nos guían las palabras de Nuestro Señor: “Por sus frutos los conoceréis”. Ahora bien, después de la reforma en la liturgia, hubo enfrentamiento en la Fe y disminución del fervor de los fieles, y según las estadísticas, disminuyó considerablemente la asistencia a la Misa dominical; en los Estados Unidos, según el “New York Times” del 24/5/76, disminución del 30%; en Francia hay, según el Cardenal Marty, disminución del 43%; en Holanda, según “New York Times” del 5/1/76, de un 50%.
8.- Porque, después de la imposición de la Misa Nueva, “la mejor parte del clero pasa, en estos momentos, por una torturante crisis de conciencia, de la cual poseemos innumerables testimonios cotidianos” (Cardenales Ottaviani y Bacci en carta a Pablo VI).
9.- Porque después de que se introdujo la Misa Nueva, según estadísticas de la Santa Sede, en sólo siete años, el número de sacerdotes disminuyó en el mundo casi en el 50%. ([De 1969 a 1976, de 413.438 a 243.307; disminución del 41.15% exactamente.) ¿Pura coincidencia? ¿Dónde está la vitalidad de la Misa Nueva? ¿Dónde está la “optatan totius ecclesiae renovationem” (deseada renovación de toda la Iglesia)?
10.- Porque “las razones pastorales aducidas para sustentar esta ruptura gravísima (con la Tradición de la Misa), aunque no tengan en ningún caso valor, frente a las razones doctrinaras, no parece, de ningún modo, suficientes” (Cardenales Ottaviani y Bacci en carta a Pablo VI).
11.- Porque la Misa Nueva no manifiesta, de modo claro, como en la Misa Tradicional, la Fe en la presencia Real de Nuestro Señor.
12.- Porque confunde de algún modo la presencia Real de Cristo en la Eucaristía con la presencia en la palabra de la Biblia y su presencia espiritual en medio de los fieles: proximidad con los errores protestantes.
13.- Porque facilita la confusión entre el Sacerdocio Jerárquico y el sacerdocio común de los fieles, como pretenden los protestantes, los rabinos y los masones.
14.- Porque favorece la Teoría protestante de que la Fe de los fieles, y no la palabra del Sacerdote, es la que hace estar presente a Cristo en la Eucaristía.
15.- Porque, al insertar la “oración de los fieles” luterana en la Nueva Misa no sólo se sigue, sino que se presenta como aceptable el error protestante de que todas las personas son sacerdotes.
16.- Porque la Nueva Misa elimina el “Yo pecador” del sacerdote, y lo hace común con el pueblo y por lo tanto favorece el rechazo de Lutero: el de no aceptar la enseñanza católica de que el sacerdote es juez, testigo e intercesor ante Dios. Las intenciones perversas y demoledoras del cardenal Ratzinger, luego papa Benedicto XVI, conllevaban desde el C.V.II, la nulificación del insustituible papel y función del sacerdote; y peor aún, como papa, la creación de un “sacerdocio masónico”.
17.- Porque la Nueva Misa deja entender que el pueblo “concelebra” con el Sacerdote,lo cual es contrario a la teología Católica.
18.- Porque fueron seis pastores protestantes los que colaboraron en su confección, sus nombres: Georges, Jasper, Shepherd, Kunneth, Smith y Max Thurian.
19.- Porque así como Lutero suprimió el Ofertorio, porque en él se expresaba de modo neto el carácter sacrificial y propiciatorio de la Misa, así también la Nueva canción del sacerdote en la Misa lo reduce a una simple preparación de las ofrendas.
20.- Porque los protestantes, sin corregir sus errores, pueden celebrar su cena usando el texto de la Nueva Misa. Es decir, se sirven de la Misa Nueva sin dejar de ser protestantes, conservando su fe protestante. Max Thurian, protestante de Taizé, dice que uno de los frutos de la Nueva Misa “será tal vez que las comunidades no católicas podrán celebrar la santa cena con las mismas oraciones de la Iglesia Católica. Teológicamente es posible” (La Croix, 30/5/69).
21.- Porque el modo narrativo de la consagración, induce a creer que se trata sólo de una memoria de la Cena y no un verdadero y propio Sacrificio (tesis protestante).
22.- Porque, por las graves omisiones, llevan a pensar que se trata sólo de una cena o de un sacrificio de acción de gracias solamente y no de un sacrificio propiciatorio; esto es, que favorece el error protestante de que la Misa es sólo un banquete y que el sacerdote sólo es presidente de la asamblea.
23.- Porque, con las otras innovaciones a que prestó ocasión, como el altar en forma de mesa, el sacerdote orientado hacia el pueblo y la Comunión de pie o en la mano, no sólo dieron margen a abusos, sino que favorecen la doctrina protestante, según la cual la misa es sólo un banquete y el sacerdote solamente presidente de la asamblea.
24.- Porque, a causa de todo eso, los protestantes, posiblemente burlándose de nosotros, dijeron: “Las nuevas plegarias eucarísticas católicas han abandonado la falsa perspectiva del sacrificio ofrecido a Dios” (La Croix, 10/12/69). Y más: “Ahora en la Misa renovada, no hay nada que pueda perturbar al cristiano evangélico” (Siegevalt, profesor de teología dogmática en la Facultad protestante de Strasburg).
25.-Porque estamos frente a un serio dilema: o bien nos hacemos protestantes o hasta de culto ecuménico del Anticristo Maitreya, con su falsa iglesia y sin Dios, “la iglesia ecuménica”, o mientras tanto siguiendo la Nueva Misa (Novus Ordo Missae), o la que surgirá en breve con su infernal doctrina permisiva del pecado, o por el contrario, conservamos nuestra Fe católica al adherirnos fielmente a la Misa tradicional de siempre de San Pío V.
26.- Porque la Misa Nueva fue elaborada de acuerdo con la definición protestante de la Misa: “La Cena del Señor o Misa es la sagrada sinaxis o asamblea del Pueblo de Dios que se congrega, presidida por el sacerdote, para celebrar el memorial del Señor” (N° 7 de la “Institutio Generalis” del 6/4/69, documento que presenta la Nueva Misa).
27.- Porque la Misa Nueva no agrada a Dios, quien detesta las cosas ambiguas y las palabras de doble sentido como es la Misa Nueva, que pretende agradar a católicos y protestantes y más a éstos.
28.- Porque quien asiste a la Misa Nueva, especialmente cuando es acompañada de cánticos nuevos de fuerte sabor protestante (sin hablar de las guitarras y baterías), tiene la clara impresión de asistir a una reunión, culto o cena protestante.
29.- Porque, siendo ambigua y favoreciendo la herejía, es peor que si fuese claramente herética, porque así es más engañadora: la peor moneda falsa es la más parecida a la verdadera.
30.- Porque la Santa Misa es el sacrificio de la Esposa de Cristo, que es la Iglesia Católica. Por lo tanto no puede ser al mismo tiempo de la Esposa de Cristo y de otras iglesias o sectas contrarias al verdadero y único Cristo: esto sería ofensivo para Cristo y su Esposa.
31.- Porque la Misa Nueva obedece al mismo esquema de la Misa protestante de Cranmer, uno de los jefes del anglicanismo y feroz perseguidor de la Iglesia; los métodos empleados para introducirla, siguen, finalmente, las huellas de este heresiarca inglés.
32.- Porque la Iglesia canonizó varios mártires ingleses que dieron su vida por no adherir a una misa muy semejante a la Misa Nueva, que era la misa anglicana.
33.- Porque muchos ex protestantes convertidos al Catolicismo quedaron escandalizados al ver en la Misa Nueva la misma “Misa” a que ellos asistieron cuando estaban en el error. Uno de ellos (Julien Green) llegó a preguntarse: “¿Por qué nos convertimos?”
34.- Porque las estadísticas nos demuestran una gran disminución de las conversiones al Catolicismo, después de la implantación de la Nueva Misa e inclusive un gran crecimiento de las sectas protestantes en los países católicos. Así por ejemplo, en los EE.UU., las conversiones que sumaban 100.000 aproximadamente por año, descendieron a menos de 10.000.
35.- Porque ningún santo celebró o asistió a esta Misa, al paso que la Misa Tradicional hizo muchos santos, según el testimonio del propio Pablo VI: “innumerables santos con abundancia nutrieron la propia piedad para con Dios mediante el mismo (Misal Tradicional))…” (Const. Apost. Missale Romanum).
36.- Porque, al contrario, la Misa Nueva está siendo instrumento y ocasión de los mayores desvaríos y profanaciones de la Santísima Eucaristía y del lugar Santo; lo cual ocurre con mucha frecuencia. Ahora bien, eso no acontecía, según el testimonio del Card. Renard, Arzobispo de Lyon, en Francia: “Acontece que son celebradas misas sin el suficiente respeto, por ejemplo, sin ningún vestido litúrgico, sin Creo in Pater, con un canon inventado, o en plena refección profana, sin oraciones”. “Sucede a veces, que hay concelebraciones con seglares o con sacerdotes casados…, que no se purifique más el cáliz al final de la Misa, o que se dejen rodar sobre una mesa o un altar partículas de pan consagrado” (Vison, messes de L´Antechrist, pág. 4).
37.- Porque la Nueva Misa es, en sí, modernista; a pesar de las apariencias inocula una nueva Fe que no es la Fe Católica. Sigue perfectamente la táctica modernista de jugar con ambigüedades y términos imprecisos para infundir errores. (Táctica denunciada y condenada especialmente por San Pío X.)
38.- Porque no constituye factor de unidad en la Liturgia, como la Misa Tradicional lo hacía, de hecho, cada sacerdote celebra la misa como quiere, bajo el pretexto de creatividad. Así el nuevo “Ordo” de la Misa merecía llamarse nuevo desorden, porque lo ha producido constantemente. Además el nuevo Ordo de la Misa no es seguido prácticamente en ningún lugar, tal como fue presentado oficialmente, lo que agrava sus defectos.
39.- Porque muchos teólogos, canonistas y sacerdotes respetables no aceptaron la Misa nueva y afirmaron que en conciencia no la pueden celebrar.
40.- Porque la Nueva Misa ha eliminado muchas cosas, tales como: las genuflexiones (quedan sólo tres), la purificación de los dedos del sacerdote en el cáliz, la preservación de los mismos dedos de todo contacto profano después de la Consagración –por eso es indebido el saludo de la paz entre los fieles y con el Sacerdote- , la piedra consagrada (Ara) y las reliquias, los tres manteles de lino (hoy se usa uno sólo), y otras muchas, lo cual no hace más que confirmar de modo específico el implícito repudio de la Fe en el dogma de la Presencia Real. (“Breve examen crítico del Nuevo Ordo” de los Cardenales Ottaviani y Bacci).
41.- Porque es una misa artificialmente fabricada y no una Misa enriquecida y perfeccionada por una tradición multisecular como la Misa de siempre que fue codificada y no inventada por un papa que fue un santo, San Pío V.
42.- Porque las traducciones en la versión vernácula (las aprobadas) de la Nueva Misa, vinieron a aumentar y agravar los errores presentes ya en su texto en latín, y así acentuaron más su carácter modernista.
43.- Porque, debido a todos esos errores y ambigüedades del rito, corre fácilmente el riesgo de ser celebrada inválidamente, quedando así la Iglesia privada del verdadero sacrificio, y nosotros expuestos a la ira de Dios. Los Cardenales Ottaviani y Bacci afirman en el examen crítico: “Los sacerdotes que en un futuro próximo no hubieran recibido la formación tradicional, y que se fiaran en el Nuevo Ordo de la Misa y en su ‘Institutio generalis’ para hacer lo que hace la Iglesia, ¿consagrarán válidamente? Es legítimo dudarlo.”
44.- Porque “la Misa es lo que existe de más bello y mejor en la Iglesia… Así, el demonio procuró siempre, por medio de herejes, como lo es Benedicto XVI, privar al mundo de la Misa, haciéndolos precursores del anticristo, el cual, antes de todo, procurará abolir y realmente abolirá el Santo Sacrificio del Altar, en castigo por los pecados de los hombres según la profecía del profeta Daniel, 8, 12: Y que le fue dado poder contra el Sacrificio perpetuo, por causa de los pecados (del pueblo)”. (Palabras de San Alfonso María de Ligorio).
45.- Porque en los lugares donde se conserva la Misa Tradicional, la Fe y el fervor de los fieles son mayores, mientras que se aprecia lo contrario donde predomina la Misa Nueva. (Lo confirma la relación sobre la Santa Misa en la diócesis de Campos, presentada al cardenal James Knox, publicada en ROMA, n° 69, agosto de 1981, pág. 29).
46.- Porque, junto con la Misa Nueva aparecieron los catecismos nuevos, la moral nueva, predicaciones e ideas nuevas, el nuevo calendario, el nuevo código, en fin, UNA IGLESIA NUEVA. La Misa Nueva es una de las manifestaciones de la nueva Iglesia y el punto central del progresismo. “La reforma litúrgica es, en sentido muy profundo, la llave del Aggiornamento (modernización de la Iglesia). No os engañéis: es ahí donde comienza la Revolución” (declaración de Mons. Dwyer, Arzobispo de Birmingham, en su calidad de portavoz del Sínodo Episcopal).
47.- Porque la belleza intrínseca, esencial, de la Misa Tradicional, atrae las almas por sí mismo, mientras que la Nueva Misa, al faltarle atracción propia, tiene que inventar novedades para interesar y poder atraer al público.
48.- Porque la Nueva Misa, entre otros nefastos cambios, contiene muchos errores ya condenados de modo dogmático por el Concilio de Trento: la Misa recitada totalmente en vernáculo; las palabras de la Consagración dichas en voz alta, por Pío VI (los mismos errores en la condenación del sínodo de Pistoya) y Pío XII (condenó, por ejemplo, en la encíclica “Mediator Dei”, el altar en forma de mesa).
49.- Porque la Misa Nueva intenta realizar el gran deseo judeo masónico de transformar la Iglesia Católica en una iglesia nueva, ecuménica y que abarque, al mismo tiempo, todas las ideologías, todas las religiones, la verdad y el error. Al respecto es sintomática la declaración de Dom Duschak, del 5/11/62: “Mi idea sería introducir una misa ecuménica…” Al preguntarle si su posición venía de sus diocesanos, respondió: “No, encuentro, inclusive, que se opondrían, como bien se oponen numerosos Obispos. Pero si se pudiese colocarla en práctica creo que terminarían por aceptar” (citado por el P. Ralph Wiltgen, en “El Rhin desemboca en el Tiber”)
50.- Porque atenta contra el dogma de la Comunión de los Santos, prescribiendo la supresión, cuando el sacerdote celebra solo, de todos los saludos y de la bendición final; del “Ite Missa est” inclusive en la Misa celebrada con ayudante (“Breve examen crítico”, Cardenales Ottaviani y Bacci).
51.- Porque da más valor al altar que al Tabernáculo. Ahora recomienda conservar al Santísimo en un lugar apartado, como si se tratase de una reliquia cualquiera, de manera que, al entrar en la Iglesia, no será ya el Tabernáculo el que atraerá inmediatamente la atención, sino una mesa despojada y desnuda (“Breve examen crítico”).
52.- Porque el nuevo rito de la Misa ha dejado de ser un culto vertical que va del hombre hacia Dios, pero convertirse en un culto horizontal, en cuanto este nuevo rito se limita a volver al hombre hacia el hombre y no al hombre hacia Dios. Además la nueva iglesia es la religión del hombre. ¿Dónde queda la gloria de Dios?
53.- Porque la Misa Nueva, diciendo obedecer al Concilio Vaticano II, en verdad contraría inclusive sus disposiciones, pues dicho Concilio declaró que la Iglesia quiere conservar y promover los ritos tradicionales.
54.- Porque la Misa Tradicional, llamada de San Pío V, jamás ha sido legalmente abrogada, de acuerdo con las leyes canónicas vigentes (cf. Cánones 22 y 30). Las Misas Tradicionales de San Pío V en latín, sí son válidas y Jesucristo está en la Eucaristía con Su Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad porque las Palabras de la Consagración, que son inalterables se mantienen, permitiendo que obre la Transubstanciación descendiendo el Espíritu Santo ante las palabras, signos y fe del sacerdote que celebra el Eterno Sacrificio para Dios y a nombre del pueblo; por eso debe celebrar el Eterno Sacrificio para Dios, de cara al altar y de espalda al pueblo.
Benedicto XVI, al ordenar el cambio de palabras de la Consagración, dejó a la Iglesia y a los fieles sin lo más bello y grande de los siete Sacramentos: ´Todo aquel que come Mi Carne y bebe Mi Sangre tendrá vida eterna’.
Si observáis bien, a partir de que Benedicto XVI nos quitó la Transubstanciación, la maldad se ha incrementado inmensamente, porque la Sangre de Cristo surgida por la Transubstanciación, protegía a la Tierra entera de los ataques de Satanás. Y a los países que también les afecto el cambio de las palabras en la Consagración de la Hostia, no están tomando realmente el Cuerpo de Cristo. Al levantar la Hostia y decir:“ésto REPRESENTA el Cuerpo de Cristo, NO hay transubstanciación”.
Cuando se dicen las Palabras para Consagrar el vino y dicen: que se dio POR MUCHOS, NO hay transubstanciación, el hecho que se diga que se dio por muchos: es una herejía, las razones las expusimos en el preámbulo de este documento.
Porque Benedicto XVI es depositario de la consigna rabínica del Priorato de Praga, que desde hace cinco siglos quería apoderarse de la Silla de Pedro, para demoler la Iglesia desde su interior; y qué mejor que sea en Sus Sacramentos y Doctrina, en su Magisterio, en la corrupción de sus jerarcas y sacerdotes; y en el ataque a sus niños y jóvenes con los crímenes de pederastia, que no solo traen consigo muchos traumas psíquicos y de identidad sexual, sino que “introducen demonios en sus víctimas y victimarios con las prácticas de una de las peores brujerías, la magia o hechicería hebraica mediante el kabalismo. El tiempo de pontificado de Benedicto XVI se caracterizó por los miles y miles de casos de pederastia cometidos por él mismo y sus jerarcas, sin exceptuar a su hermano Luis. El Lobby Gay Vaticano nace con Benedicto XVI.
Benedicto XVI encubría decenas de miles de crímenes de estas abominaciones bajo un documento secreto llamado “Decreto del Delito de Sollicitationis”. La Iglesia entera se vio envuelta en escándalos gigantescos, su propio equipo de trabajo en el Vaticano tuvo que ser cambiado en la mitad de sus integrantes, acusados de abusos sexuales, tráfico de influencias y enriquecimiento ilegítimo, además de las misas negras y rojas y de las orgías llevadas a cabo en el Vaticano, algunas con sacrificios humanos; aunque los nuevos jerarcas y titulares de Comisiones Pontificias y otros organismos fueron todavía más perversos que los anteriores.
Todo esto y mucho más, fueron las desastrosas consecuencias de las prácticas de brujería judía y el cabalismo, hechos descubiertos desde su coronación con la Mitra cabalística con los demonios Lucifer y Pan (Pantera o Baphomet -Apoc.13,2- ); amén de pronunciarse, por el anhelo y misma meta de sus hermanos cofrades sectarios illuminati y masones, de imponer el Nuevo Orden Mundial y una iglesia ecuménica que lidere el tercer y más grande anticristo de la historia, después de Nerón y Hitler: el anticristo Maitreya.
Arguyeron múltiples cosas para “tratar de convencer” a la gente que el cambio era válido; y a la larga lo lograron. Las consecuencias han sido terribles, tremendas.
De principio a fin, en las Sagradas Escrituras, se habla de que nuestro Dios, es Dios de TODOS, no hace excepciones, el hombre es el que escoge estar o no estar con Dios y Él siempre nos está buscando para salvarnos a todos, entonces el hecho de que digan en la Consagración que ‘se dio por muchos’, es una “HEREJÍA”.
55.-Porque el Papa San Pío V concedió un indulto perpetuo (que no fue hasta hoy abrogado) válido para siempre, para celebrar la Misa según su Misa, libre y lícitamente, sin ningún escrúpulo de conciencia y sin que se pueda incurrir en alguna pena, sentencia o censura (Bula “Quo Primum Tempore”).
56.- Porque Pablo VI, al presentar la Nueva Misa, no tuvo la intención de comprometer en ella la infalibilidad pontifica. Fue él mismo quien lo declaró, en el discurso de 19/11/69, refiriéndose al nuevo Ordo: “El rito y la respectiva rúbrica de por si no son una definición dogmática; son susceptibles de una codificación teológica de valor diverso…”
57.- Porque cuando el Cardenal Heenan de Inglaterra le preguntó al papa Pablo VI si había o no prohibido la Misa Tridentina, le respondió que “no era su intención prohibir absolutamente la Misa Tridentina” (Card. Heenan en carta a Houghton Brouw, presidente de “Latin Mass Society”).
58.- Porque la autoridad no puede imponernos una práctica que va claramente en contra de la Fe: una Misa equívoca y que favorece la herejía y que, por tanto, desagrada a Dios.
59.- Porque el Concilio Vaticano I (dogmático y no sólo pastoral) define: “El Espíritu Santo no fue prometido a los sucesores de San Pedro para que estos, bajo la revelación del mismo, predicaran una nueva doctrina, sino para que, con su asistencia, conservasen santamente y expusiesen fielmente el Depósito de la Fe, o sea, la Revelación heredada de los Apóstoles” (Dz. 3070). Ahora bien, por lo que vimos antes, La Misa Nueva o Novus Ordo Missae vehicula una nueva doctrina; y desde su nombre tiene el sello o tinte sectario, se le identifica con el lenguaje de los sectarios illuminati que promueven los rabinos de la Sinagoga de Satanás para el Novus Ordo Seclorum(Nuevo Orden Mundial, o Nuevo Orden de los Pueblos o Naciones, escrito en el billete de un dólar con la simbología illuminati del Nuevo Orden Mundial) que proclamó mañosamente Benedicto XVI –ver vídeo-.
60.- Porque la herejía, o todo a aquello que la favorece, no puede ser materia de obediencia. La obediencia está al servicio de la Fe y no la Fe al servicio de la obediencia. Es este caso, “se debe obedecer antes a Dios que a los hombres” (Act. 5, 29).
61.- Por todo lo expuesto y las “herejías” de Benedicto XVI, él NO FUE, NI HA SIDO NUNCA UN “LEGÍTIMO PAPA”.
Los jerarcas cómplices de su Priorato así lo quieren hacer ver, pero Benedicto XVI es mucho peor que el también antipapa Jorge Mario Bergoglio o “Francisco”, ambos, pertenecientes a manadas de lobos que se disputan el poder en el Vaticano y Sus Más Altos Reinos en la Jerarquía.
Se trata de un doble juego engañoso para confundir a los fieles, por si ya habían olvidado todos los arteros golpes que ha asestado contra Jesucristo, Su Iglesia, Sacramentos, Doctrina y Magisterio; además los miles de casos de violaciones a los hijos de los fieles y de perversión de sus pastores para prostituir a la Esposa de Cristo: la Iglesia.
SE TRATA, POR LO TANTO,
DE UNA OBLIGACIÓN GRAVÍSIMA DE CONCIENCIA
EL NO ACEPTAR LA NUEVA MISA.
DE UNA OBLIGACIÓN GRAVÍSIMA DE CONCIENCIA
EL NO ACEPTAR LA NUEVA MISA.
EN ESO ESTA EN JUEGO LA SALVACIÓN ETERNA
Parte 3 de la Serie: “Las Herejías de Benedicto XVI”.
Ver https://antiiglesia.blogspot.com Serie: ¡Cómo llegó 'el ladrón' a la Silla de Pedro!
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